domingo, 25 de enero de 2009

Balance 2008 de Nudoylana


Lejos de los brindis y los auspiciosos augurios de fin de año, podemos pensar lo que dejó el 2008 para este proyecto incipiente. Antes que nada el apoyo y aliento de muchos amigos y conocidos que ante la propuesta ofrecieron, no sólo elogios, sino también sugerencias para ayudar a crecer.
Cómo olvidar a mis primeras asesoras, Eugenia y Pato, y mi primera modelo, Angie que siempre estuvieron dispuestas
Otros que abrieron puertas y acercaron datos y contactos dentro de este nuevo mundo de las artesanías. En ese trayecto, de la mano de Luisa, conocí a Mónica Vázquez que habiendo transitado ya caminos hace algunos años dentro del campo de bijouterie, me brindó generosamente comentarios y aspectos de su propia experiencia para comenzar a desarrollarme. Otro aliento me llegó del otro lado del río, con Ana Varela, avezada en el trabajo con lana.
Quizás un aspecto importante en el año fue comenzar a adentrarme en la técnica. Clases con Patricia Gerard me ayudaron a entender algunos elementos que sólo aplicaba por intuición. Un comienzo para descubrir lo necesario que es mejorar la aplicación de técnicas para el crecimiento.
Mi primera feria y el apoyo de toda mi familia, otro hito importante.
Y por sobre todo la alegría y el placer de crear objetos que interesan a otros y no sólo dan rienda suelta al juego estético del hacer.